Tengo que comunicar una noticia muy triste... para mí.
En enero del 2007 me hice un par de piercings con los que me encariñé muchísimo ya que según yo se me veían chido. Una de las perforaciones fue en la ya trilladísima ceja (igual me gustaba) pero sin duda mi favorito fue el del labio, que por cierto me dio muy buenos resultados instantáneos (excluyendo el ser llamado emo en cualquier lugar que estaba).
Durante más de un año usé este par de joyería día y noche, exceptuando un par de ocasiones: el día de mi graduación, y para una entrevista de trabajo (seguimos cruzando los dedos).En enero del 2007 me hice un par de piercings con los que me encariñé muchísimo ya que según yo se me veían chido. Una de las perforaciones fue en la ya trilladísima ceja (igual me gustaba) pero sin duda mi favorito fue el del labio, que por cierto me dio muy buenos resultados instantáneos (excluyendo el ser llamado emo en cualquier lugar que estaba).
Recuerdo el día que llegué a Chihuahua con mis nuevas adquisiciones (ni tan nuevas entonces, ya tenía 6 meses con ellos). Cómo olvidar el "¡estás loco, cabrón!" de mi padre y mi madre con gestos de dolor como si le estuvieran haciendo los piercings a ella... Lo bueno es que se acostumbraron.
En fin, al parecer la entrevista que mencioné anteriormente está rindiendo frutos, y es necesario que me presente a una última entrevista el día de mañana. El resultado:
Van a decir que qué nena soy, pero la verdad me duele más que el día que me los pusieron.
Mi cara ya no tiene chiste, ja. :'(
Se aceptan comentarios para subirme los ánimos.
¡Ah! Y si tienen chance de hacerse un par de piercings, lo recomiendo altamente.
A ver si mínimo ya la gente no me ve como malandro.
Flores, out.